En este 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajo, queda claro para millones de trabajadores y trabajadoras el fracaso de las políticas neoliberales, impuestas por la “troika” y seguidas a rajatabla por los Gobiernos de los países de la Unión Europea, entre ellos el de Mariano Rajoy. Estamos en el quinto año de crisis y de aplicación de esas medidas y el resultado es más paro; una mayor recesión económica; una creciente destrucción de tejido productivo con cierre de empresas, especialmente pequeñas; un intento de hacer retroceder los derechos de los trabajadores y la negociación colectiva, y una mayor pobreza.
Lo que se nos presenta desde el Gobierno del PP como soluciones a la crisis no lo es. Al contrario, busca beneficiar los intereses de las grandes empresas y los bancos. Se trasvasan recursos económicos a los empresarios, mediante el paro, la precariedad en la contratación y la disminución de los salarios; se recortan servicios sociales fundamentales como la sanidad, la educación y la ayuda a la dependencia, y se limitan los derechos sindicales y democráticos.
Izquierda Unida quiere poner de manifiesto en este 1 de Mayo que la política que es necesaria para atender a las personas en esta crisis, es también posible.
HAY ALTERNATIVAS PARA LOGRARLO
Lo hemos demostrado con la propuesta de nuestra Consejera de Fomento y Vivienda en la Junta de Andalucía, aprobando un decreto sobre las medidas para garantizar el derecho social a la vivienda. Hemos cambiado la filosofía que intenta imponer el Gobierno del PP: la vivienda no es una mercancía, es un derecho. Si hay voluntad política, hay alternativa.
También hay alternativa en el marco de Europa. Nos solidarizamos con todos los trabajadores europeos que este 1 de Mayo salen a las calles y a las plazas en demanda de una Europa de los pueblos, más democrática y más social.
No basta retrasar unos años el cumplimiento del objetivo de déficit que impone la Comisión Europea; debe haber una política de apoyo al empleo digno y a la economía real y sostenible, con un papel diferente del BCE que debe respaldar la deuda pública de los países miembros.
Izquierda Unida propone un debate para el necesario cambio de modelo productivo, dando prioridad a actividades con futuro, adecuadas a las necesidades del mercado, sostenibles y potentes en la creación de empleo, con una fuerte incorporación de I+D+i.
Ese nuevo modelo productivo es la matriz necesaria para el incremento de contratos de trabajo, dignos y bien retribuidos, que no requieran un alto porcentaje de crecimiento del PIB, y que conlleven a corto y medio plazo la trasformación del proceso de aumento del paro en una curva creciente de creación de empleo.
Izquierda Unida propone una reforma fiscal democrática y progresiva que, unida a la liquidación del fraude y la economía sumergida, proporcione los recursos suficientes para limitar el déficit y la deuda y financiar las políticas de creación de empleo y de atención suficiente a los servicios públicos.
En este 1 de mayo denunciamos especialmente el debilitamiento de la democracia, las campañas antisindicales y la denostación interesada de la política. El comportamiento del Gobierno, criminalizando los movimientos sociales y procurando ningunear administrativamente a la oposición es inadmisible.
Izquierda Unida apoya las movilizaciones que se están produciendo en todo el país, de las que son un ejemplo combativo las Huelgas Generales frente a las políticas de recortes y las movilizaciones ciudadanas de las “mareas” y el 15-M por la defensa de los servicios públicos.
El Día Internacional del Trabajo de 2013, Izquierda Unida reivindica, junto a los trabajadores y trabajadoras:
– Una nueva política de apoyo a la creación de empleo
– La derogación de la reforma laboral
– La protección y garantía de las pensiones públicas
– La garantía frente a la privatización de unos servicios públicos de calidad
– La participación popular y la calidad de la democracia
– La dimisión de Rajoy y su Gobierno y la convocatoria de elecciones generales.
SOMOS MILES,
SOMOS MILLONES.
¡VIVA EL 1 DE MAYO!